 | | Jorge Zabaleta, quien ya tiene 38 años, pero que ni se le notan, compartió de lo lindo con las 10 fanáticas que ganaron el concurso. El Papi Ricky contó que no sabe por qué descontrola tanto a las mujeres. "Encuentro que estoy hecho un trapo, no me maquillo y a penas uso crema en las mañanas", dijo muy humildemente el galán. | CAR0LINA GATICA
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Lleno de besos y abrazos de las penquistas se fue el guapetón del momento, Jorge Zabaleta, más conocido por estos días como Papi Ricky, luego de un show realizado la tarde de ayer, en la tienda La Polar, en el marco de su aniversario.
El pobre "papi chulo" pasó más susto, pues cuando ingresaba al escenario, todas las penquistas que iban con la excusa de que sus hijas lo querían conocer, se le abalanzaron encima y no lo dejaban ni respirar de tantos autógrafos y fotos que le pedían.
"Estoy muy contento de estar en esta bonita ciudad y agradecido por la invitación que me hicieron. Llegué recién, vine sólo por el evento y una vez que acabe aquí me vuelvo para Santiago, así que no podré pasear mucho", comentó a Crónica, minutos antes de salir al escenario, mientras compartía con las 10 ganadoras del concurso.
Es mejor en vivo
"Es igualito a como uno lo ve en la tele, pero en vivo es mejor, es muy apuesto y se mantiene bien", expresó Odette Reyes, una de las ganadoras que compartió en privado junto al actor. Esta señora que no quiso revelar su edad, pero que bordea los 55, era la más contenta de tener al churrazo a su lado.
Por su parte, Karen Sandoval (19) y Darling Saavedra (14) no podían creer que tenían al Papi Ricky sentado a su lado.
"Lo que más gusta de él es que es tan varonil, su pinta y todo enterito es atractivo", decían las adolescentes suspiro, tras suspiro.
A partir de las 14.30 y hasta las 15.45, el artista estuvo de lo más relajado conversando con las suertudas, comiendo canapés y tomando juguitos. Mientras que afuera, en la sección niños de la tienda, el despelote era cada vez más grande, pues todas querían ver y tocar a Zabaleta.
Un gran número de niños no hacía otra cosa que gritar su nombre y empujar las barreras de seguridad con tal de quedar más cerca del invitado.
Los guardias, armados de paciencia, entre tanto griterío, les decían: "Ya, tranquilícense, o si no, el Papi Ricky no les firmará ningún autógrafo".
A SAN PEDRO DE ATACAMA LOS BOLETOS
El papi chulo manifestó que no cachaba por qué volvía tan locas a las mujeres, pero que le gustaba sentir el cariño de la gente.
"Puede ser porque soy un personaje público y agraciado", dijo entre risas, agregando que "igual he pasado preocupaciones. El año pasado, cuando vine al mall, una niña se tiró por la ventana quebrándola y se hizo daño, entonces la idea no es producir una histeria colectiva. Ahora me preocupo de que haya más seguridad y control", contó.
Otro de los detalles que nos reveló, fue que la próxima semana terminará de grabar la teleserie del canal del angelito y que luego de eso se dedicará a descansar y estar con su familia, sobre todo con sus hijos.
"No tengo planes de novelas, ni grabaciones, ni tampoco teatro. Quiero descansar, así que me iré al Norte, a San Pedro de Atacama, con uno de mis hijos, porque estoy terminando unos proyectos para la construcción de un hotel allá", concluyó el morenazo. NOTA DEL EDITOR: Se llama Papi Ricky, aweonaa... Me vine pa' Santiago y estos no aprendieron nada
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